Vivir en una casa miniatura es una elección de estilo de vida que promueve el minimalismo y la simplicidad. Las casas miniaturas hacen que sea más fácil pagar las facturas, ya que tienen una hipoteca más pequeña, costos de servicios públicos más bajos y requieren menos mantenimiento. Sin embargo, vivir en una casa miniatura obliga a una persona a reducir sus posesiones, ya que el espacio es limitado.