La construcción de una casa modular ocurre en una fábrica. Los trabajadores fabrican cada una de las paredes, pisos y techos paso a paso para asegurarse de que todos sean del tamaño correcto y estén hechos de materiales duraderos. Después, los módulos se entregan al lugar donde se lleva a cabo la construcción. A diferencia de los métodos tradicionales, el método modular se ve menos afectado por el clima y minimiza el ruido durante la construcción. El método modular también permite al constructor ahorrar dinero, ya que los bienes producidos en masa son más baratos, mientras se mantiene una vivienda fuerte.